El presidente de Iberia, Javier Sánchez-Prieto, ha desglosado la estrategia de la aerolínea respecto a la transición verde, sustentada en una renovación actual de su flota, en el uso de “biocombustibles” a medio plazo y en la implementación de motores propulsados por combustibles que “no emitan CO2” a la atmósfera en el futuro en una entrevista concedida a EFE Comunica para Global Mobility Call.
En este “largo camino” hacia una huella de carbono neutra para 2050 en un sector responsable del 2,4 % de las emisiones de CO2 a nivel global, Prieto ha destacado las “inversiones millonarias” acometidas por la compañía española para modernizar su flota en busca de una mayor eficiencia.
«Desde 2013 Iberia ha incorporado cuarenta nuevos aviones que disponen de una tecnología capaz de emitir menos CO2 a la atmósfera», con una reducción total de un «15 % para los aeroplanos más pequeños» y de hasta un 35 % en los más grandes, ha argumentado el directivo.
Dentro de las alternativas a los combustibles fósiles, Iberia realizó el pasado mes de noviembre el primer vuelo de España, Madrid-Bilbao, que empleó biocombustible producido a partir de la recuperación de residuos en una refinería, a través de un acuerdo entre Repsol y la propia aerolínea.
La adaptación de estos carburantes más sostenibles a la aviación es, según Prieto, “relativamente sencilla” aunque, a su juicio, la industria debe garantizar una producción en “grandes cantidades” y a un “coste adecuado” para favorecer su implementación constante a medio plazo.
Con estas soluciones para liderar la movilidad sostenible en el transporte aéreo en España, Iberia se presentará en el congreso Global Mobility Call, que se celebrará en IFEMA MADRID, del 14 al 16 junio, y reunirá a grandes líderes empresariales e institucionales de la industria.
Este punto de encuentro internacional supone un “buen germen” para debatir y alcanzar consensos en temas como la “recuperación postpandemia” o la transición hacia un transporte más respetuoso con el medio ambiente, ha añadido el presidente.
También apuntó una “demanda robusta” de viajes de cara a la temporada estival, donde prevé alcanzar el 85 % de pasajeros respecto a los niveles previos a la crisis sanitaria de 2019, mientras que la recuperación plena de la actividad turística la situó a comienzos del año 2023.
De hecho, el próximo mes de junio, Iberia abrirá dos nuevas rutas de cuatro vuelos semanales a las ciudades de Washington y Dallas, con las que esperan contrarrestar otros destinos que permanecen inoperantes como Japón o las limitaciones existentes para viajar a China.
En términos de movilidad global, el empresario español ha puesto el foco tanto en la intermodalidad como en el desarrollo de ‘hubs’ más eficientes y, en esa línea, calificó a la T4 del aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas como una “plataforma magnífica” para el tráfico de pasajeros y la conexión entre Europa y Latinoamérica.
“A día de hoy existen en España más de 500 mil pasajeros que vuelan desde ciudades que no son Madrid, a través de otros hubs a destinos que se siguen desde el aeropuerto de Madrid”, ha concluido Sánchez-Prieto.